Museo Nacional de Arte de Cataluña

En el Museo Nacional de Arte de Cataluña podrás disfrutar de colecciones de arte románico, arte gótico, del Renacimiento y del Barroco, arte moderno, dibujo, grabado y cartel, fotografía y numismática. Además, el fondo cuenta con la Biblioteca de Historia del Arte y el Archivo General y organiza exposiciones temporales que van más allá de la propia temática del museo.

Destaca la impresionante serie de conjuntos de pintura mural, gran parte de la cual procede de pequeñas iglesias rurales de los Pirineos y de otros lugares de la Cataluña Vieja que fueron recuperadas por el Institut d’Estudis Catalans a principios del siglo XX. Entre ellas, es de especial importancia el famoso Pantocrátor o Cristo en Majestad, obra maestra del siglo XII, que se encontraba en el ábside de Sant Climent de Taüll. Dentro de la colección de arte románico también cabe mencionar el conjunto de pinturas sobre madera, único en Europa.

Además de contemplar grandes obras de arte románico y gótico, en el Museo Nacional de Arte de Cataluña podrás efectuar un recorrido por la transición del gótico al Renacimiento y llegar hasta el Barroco, con especial mención al conjunto de obras de la colección particular del político y mecenas catalán Francesc Cambó, que ha enriquecido el fondo del Renacimiento y Barroco con obras del Quattrocento italiano y los maestros del Cinquecento, como Sebastiano del Piombo o Tiziano, pasando por la pintura española del Siglo de Oro hasta el rococó. Al legado Cambó se añade la colección Thyssen-Bornemisza, un conjunto de pintura y escultura que presenta una visión global del arte europeo desde el siglo XIV hasta el XVIII.

La colección de arte moderno nace a partir de la Exposición Universal de 1888 y actualmente reúne un conjunto del mejor arte catalán desde principios del siglo XIX hasta los años cuarenta del siglo XX. El recorrido se inicia en el Neoclasicismo y avanza por el Romanticismo y el realismo hasta llegar a uno de los ejes vertebradores de las colecciones de arte moderno: el modernismo, con la incorporación de algunos conjuntos excepcionales de interiorismo procedentes de las casas Amatller, Lleó i Morera y Batlló. Otro movimiento ampliamente representado en el Museo Nacional de Arte de Cataluña es el novecentismo, que dio paso a la vanguardia.

El edificio sede del Museo Nacional de Arte de Cataluña también posee interés artístico y arquitectónico. Se trata del Palau Nacional de Montjuïc, de estilo clasicista, inspirado en el Renacimiento español y proyectado por Eugenio Cendoya y Enric Catà. El palacio, con una superficie de casi cincuenta mil metros cuadrados, tiene una planta rectangular con dos cuerpos laterales y uno posterior cuadrado. Su fachada está coronada por una gran cúpula, inspirada en la de San Pedro del Vaticano; dos cúpulas menores, una en cada lado, y cuatro torres inspiradas en la catedral de Santiago de Compostela. Las vistas que proporciona el patio delantero son de las más excepcionales de la ciudad.

¿Cómo llegar al Museo Nacional de Arte de Cataluña?

Con la parada MNAC de la ruta Roja del Barcelona Bus Turístic llegarás al lateral del Palau Nacional, donde se encuentra el museo.

Para los más curiosos

• ¿Sabías que...? Desde el año 2013, es posible acceder a las terrazas del palacio y recorrer por el exterior del edificio, disfrutando de inmejorables vistas de la ciudad.

• Consejo del barcelonés: La colección del Museo Nacional de Arte de Cataluña es verdaderamente extensa. Para que puedas planificar tu visita, te recomendamos que consultes previamente su catálogo en línea y prepares un recorrido a tu medida.

• Imprescindible para: Disfrutar del arte catalán en toda su amplitud y, sobre todo, contemplar la mejor colección de pinturas de arte románico del mundo.