La Rambla del Poblenou

Proyectada a mediados del siglo XIX, dentro del plan Cerdà para el Ensanche, la Rambla del Poblenou fue una ráfaga de aire fresco para un barrio de gran tradición industrial que comenzaba a crecer. En su momento, recibió el nombre de paseo del Triomf, pero siempre se la ha conocido como Rambla del Poblenou, nombre que adoptó oficialmente en 1986.

Se trata de una clásica avenida, de un kilómetro de longitud, que se estructura en tramos de formas rectangulares y circulares desde la Gran Via de les Corts Catalanes hasta el mar, cruzando el barrio del Poblenou. A ambos lados del paseo se aglutinan restaurantes, bares, comercios y establecimientos tradicionales, como el Casino de La Alianza, sede de la vida sociocultural del barrio desde finales del siglo XIX. También hay esculturas que enriquecen el paseo, como la que encabeza la rambla, que está dedicada al doctor Josep Trueta y es obra de Josep Ricart i Maimir, o "L’adolescent", de Martí Llauradó.

Además, en el chaflán de la Rambla del Poblenou y la calle de Pallars se encuentra la Casa Ramon Serra, un edificio modernista, construido por el arquitecto Jaume Bayó entre los años 1906 y 1909. La casa destaca por su coronamiento escalonado y por el trabajo de la piedra de los bajos, así como por los esgrafiados florales del piso superior. En su fachada se alternan balcones con finas ménsulas y balconcillos sostenidos por ornamentación vegetal; en la puerta y la ventana de la esquina, que acaban con un coronamiento más alto que el resto, verás una arcada rematada por un dragón circunscrito en un óculo.

¿Cómo llegar a la Rambla del Poblenou?

La Ruta Roja del Barcelona Bus Turístic tiene la parada Glòries, que te permitirá llegar hasta la rambla del Poblenou.

Para los más curiosos

• ¿Sabías que...? Desde 1996, el barrio participa en la iniciativa Talleres Abiertos, que abre los talleres de los artistas a toda la ciudadanía y organiza actividades culturales para dar a conocer la importante creación artística del Poblenou.

• Consejo del barcelonés: En la esquina de la Rambla del Poblenou con la calle de Ramon Turró encontrarás un establecimiento centenario y todo un emblema del barrio: El Tío Che, una horchatería y heladería artesanal que también fue el segundo establecimiento de salchichas de Frankfurt de Barcelona. Si no sabes qué es la horchata, ¡no puedes irte de la ciudad sin probarla!

• Imprescindible para: Descansar en alguna de sus terrazas después de un día de playa.