Parada Palau Reial – Pavellons Güell
Desde esta parada podrás contemplar varias obras de Gaudí: los coloristas pabellones Güell, el impresionante dragón de hierro que, sobre la reja de entrada, vigila la propiedad y la fuente de Hércules, una escultura con un busto del héroe mitológico Hércules, que descansa en los jardines del Palau Reial.
Un palacio real guardado por un dragón de hierro
La Ruta Azul del Barcelona Bus Turístic desciende por la avenida de Pedralbes, pasa por delante del magnífico dragón que custodia los pabellones Güell y tiene una parada, Palau Reial – Pavellons Güel desde la que podrás visitar el recinto del palacio, con los pabellones y sus jardines, así como el parque de Cervantes.
El palacio es un edificio de cuatro plantas y fachada novecentista que fue remodelado cuando Eusebi Güell cedió su propiedad para que sirviera de residencia real en Barcelona. En su interior, es interesante contemplar la decoración, el mobiliario y la cámara que usó el rey Alfonso XIII, mientras que en el exterior puedes pasear por unos extensos jardines diseñados por Nicolau Maria Rubió i Tudurí, que se articulan en torno a un gran estanque central con una escultura de Eulàlia Fàbregas.
Pero, sin duda, el elemento más original del conjunto es la puerta de entrada lateral al recinto, vigilada por un magnífico dragón de hierro con ojos de cristal obra de Antoni Gaudí, que también diseñó los coloristas pabellones de la portería y las caballerizas.
Si deseas continuar con tu paseo, al final de la avenida Diagonal puedes adentrarte en el parque de Cervantes, un amplio y exuberante espacio que acoge una enorme rosaleda con variedades procedentes de América, Europa, Asia y Oriente Medio.
Qué ver
- Palau Reial y jardines de Pedralbes
Los mejores arquitectos, escultores y paisajistas de la época transformaron una masía y su huerto en un majestuoso palacio real rodeado de jardines.
- Pabellones Güell
Solo Gaudí puede hacer de dos pabellones y una puerta de entrada una auténtica obra de arte, repleta de detalles mitológicos.
- Parque de Cervantes
Un parque de más de 5 hectáreas, con 10.000 rosales de unas 2.000 especies y variedades diferentes, dedicado al escritor Miguel de Cervantes.